Ernesto Sabato (1911 - 2011)

En uno de sus libros, "Abaddon, El Exterminador", nuestro escritor nos dijo: "Es posible que mañana muera, y en la tierra no quedará nadie que me haya comprendido por completo. Unos me considerarán peor y otros mejor de lo que soy. Algunos dirán que era una buena persona; otros, que era un canalla. Pero las dos opciones serán igualmente equivocadas."


Just Smile.




"La sonrisa es tan importante como el uniforme de un empleado". La definición que bien podría acompañar la nomina de empleados del mes en algún negocio de comidas rápidas, corresponde a Osamu Ohkawa, portavoz de Keikyu, una empresa privada de trenes de Japón, que ha instalado escaneres de sonrisa para medir las que sus trabajadores van repartiendo por ahí, en 15 estaciones de Tokyo. "Nos ayuda a desarrollar una mejor interacción con los pasajeros", declaraba (siempre sonriendo) a BBC News Mitsue Endo, apostada en atención al público. El escaner funciona asociado a una computadora: el trabajador se sienta ante la pantalla y sonríe; la maquina lee los ángulos de la boca y de los ojos y aprueba o no el esfuerzo risorio. Si pasa, solo debe congelar esa sonrisa y replicarla. Si no, recibe recomendaciones del tipo: "Está Ud. muy serio". Otras empresas niponas como los almacenes Takashimaya realizan cursos para sonreír entre empleados. Reírse de estas tecnicas está prohibido.

Lunes, y debo reconocer que comencé la semana un tanto intolerante. Esas irrupciones o "pequeñas crisis" de mal humor mensuales, una especie de síndrome premenstrual ficticio ( dado que la realidad biológica a la que claramente estoy subordinado hace imposible que sea real ) al que se ven sometidos mis convincentes, victimas de mis insultos, reclamos y chisporroteos inmorales.
En fin, la mera introducción no viene al caso, ya que es otra la excusa de este espacio. Simplemente quería compartir una pequeña historia, que en relato purpura llegó a mis oídos y que en clave de moraleja nos alecciona sobre la invertebrada inconformidad que padecen algunos compañeros de especie:

Cuentan los ancianos que en un pueblo perdido en la estepa rusa habitaba un hombre que se hacia llamar Nasrudín. Este señor, entregado a las artes del trabajo de la tierra y cuidado de su jardín, había logrado, en épocas de hambruna y escasez, cultivar enormes zapallos. Emocionado por su buena fortuna y en un gesto de generosidad, se propuso regalarle parte de su cosecha al Zar. Su vecino, contrariado por la buena fortuna de Nasrudín, vio con malos ojos dicha muestra de generosidad, y enfermo de envidia, emprendió la vil tarea de frustrar las buenas intenciones del campesino. "- El Zar preferirá higos en esta época del año, son su debilidad" ( sabiendo el profundo asco que este fruto generaba en el Zar ), le dijo a Nasrudín en la mañana en la que este cosechaba los zapallos destinados al soberano.

Moralina


A veces nos encontramos discutiendo, o quizás intentando imponer nuestra opinión frente a la de nuestro interlocutor, y cometemos errores en nuestros planteos, que en definitiva no hacen mas que debilitar aquello que intentamos afirmar.

"Muchas posiciones morales que la gente sostiene están determinadas por confusiones conceptuales y lógicas que pueden ser racionalmente esclarecidas.

Yos.


Guardiacarcel de la Luna y plomero del Infierno. Soy justicia a destiempo
y en la noche, mal agüero. Visitante inoportuno, de costumbres acertadas;
hijo prodigo mal habido, del gigante la ultima cana. Moribundo entre los
necios, anodino entre los muertos. Demasiado astuto para ganar la confianza
ajena. Discípulo fiel de lo bajo, maestro orgulloso del barro. No soy huevo
en tu nido, ni corrupto en tu gobierno. En tus calles soy el pobre, en tu año
el Invierno. De tus deudas, ni la firma. De tus lágrimas, el dueño.

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